¿Qué es un bimbape?

Pastores herreños Domingo González y Manuel Padrón. Las Casas, El Pinar. Foto: Maximiano Trapero.

¿Existía un sentimiento identitario único entre los antiguos herreños? ¿Estaban organizados en una sola confederación? ¿Todos eran bimbapes, o sólo algunos? ¿Fue su gentilicio durante cientos o miles de años, o sólo en el momento de la Conquista? ¿Por qué necesitaban un gentilicio? ¿Quizás para diferenciarse de otros?


Blog Palabras Bimbapes. Por diversas circunstancias historiográficas no somos capaces aún de dar una respuesta íntegra a esta pregunta, a la cual se han aventurado a responder muy a la ligera varios investigadores de renombre, simplificando realidades que están aún por determinar tras siglos de investigación. La explicación es sencilla: no tenemos constancia documental hasta el momento de que ningún bimbape escribiera un texto más o menos extenso sobre su Historia desde su punto de vista sociocultural. 

Las únicas referencias documentales de las que disponemos sobre los antiguos herreños fueron escritas por autores medievales, algunos de ellos llegados con la Conquista normanda (1402), cuya interpretación de la realidad fue plasmada con su sesgo cultural y religioso de origen, y de forma muy simplificada. Por lo tanto, son datos muy pobres, que además deben ser tratados con mucha cautela y que necesitan siempre de corroboración científica. Pasión y paciencia es por tanto una balanza que debemos saber equilibrar como investigadores.

¿Existía un sentimiento identitario único entre los antiguos herreños? ¿Estaban organizados en una sola confederación? ¿Todos eran bimbapes, o sólo algunos? ¿Fue su gentilicio durante cientos o miles de años, o sólo en el momento de la Conquista? ¿Por qué necesitaban un gentilicio? ¿Quizás para diferenciarse de otros? No lo sabemos. Sin embargo, es muy probable que este gentilicio designara a la población de la isla en su conjunto en el momento de la Conquista, pues debemos tener en cuenta que ésta nunca fue numerosa, dados los escasos recursos hídricos existentes (una isla volcánica y joven) y su limitada superficie (284 km2). Se dan los condicionantes perfectos para un sistema de organización social unitario y fuertemente jerarquizado.

Mujer amazigh Ayt Sliman del Alto Atlas. (c) M. Peyron

Por ahora el término bimbape, un nombre compuesto con clara morfología bereber, nos arroja con mucha probabilidad el equivalente en bereber win wafa "los de la cima" -asimilación b < w y p < f-. Esta aproximación también podría explicar a qué se debe la aparición de un segundo gentilicio: bimbache, (condenado por algunos lingüistas e historiadores a la invención, y por ello proscrito) teniendo en cuenta que es posible la fórmula plural win afaten -asimilación b < w, b < f y ch < t y simplificación léxica- "los de las cimas".

La hipótesis anterior parece aproximarse bastante a la solución del problema, pues si hay algo que repiten los cronistas, es que esta sociedad era azotada constantemente por las correrías esclavistas medievales, motivo por el cual vivían generalmente alejados del mar. Este fenómeno estacional fue algo que se repitió tras la Conquista, pues tanto las antiguas capitales de San Andrés de Asofa (La Albarrada) y posteriormente Las Montañetas, se encuentran sobre los 1000 m.s.n.m. Incluso actualmente, la única capital de Canarias que se ubica lejos del mar es Valverde, situada a una altura de unos 600 metros sobre éste.

Bimbape es un gentilicio que se ajusta a la morfología geológica de El Hierro. Se trata de una isla de origen volcánico reciente, casi inaccesible desde el mar debido a sus vertientes vertiginosas que alcanzan los 1500 metros, haciendo de ella la segunda isla del Planeta con mayor pendiente media después de Fogo (Cabo Verde). Algunos estudiosos de su geografía la han nombrado como “la isla de las mil montañas y de los pocos barrancos”. Teniendo en cuenta que la mayoría de asentamientos históricos se sitúan por encima de los 600 metros, "los cumbreros" o win wafa es un buen gentilicio para sus habitantes.

Por último, cabe destacar que es muy probable que los antiguos herreños o bimbapes -o incluso bimbaches como hemos visto-, tuvieran la misma sensación que cualquier viajero que visita los pueblos históricos de la Isla: la de estar sobre la cima de una gran cadena montañosa. 

El nombre amazigh con el que se conocía a El Hierro en el momento de la Conquista era Eseró, con el significado de "fuerte" según los cronistas. Tanto la designación como la traducción coinciden perfectamente con la palabra amazigh azro -la /z/ es una /s/ sonora en bereber- "cadena montañosa, fortaleza, piedra, peñón, etc.". Quizás de este bagaje cultural venga la costumbre de algunos campesinos de decir "el peñón herreño" en lugar de "El Hierro". Se trata de un término muy usado en la toponimia norteafricana para designar poblaciones fortificadas por montañas o grandes roques. Es el caso de la popular localidad de Azrou (Atlas Medio, Marruecos).

Ciudad de Azrou en el Atlas Medio (Marruecos)