Bonifacio García, Tasarte (Gran Canaria). Foto: Talio Noda |
IẒUṚAN. Uno de los elementos
culturales amazighes de Canarias que escapó de la desaparición y llegó hasta
nuestros días fue la práctica del Salto del Pastor Canario. Una práctica documentada
entre la población indígena de Canarias y extendido por todo el Archipiélago.
A finales del siglo XX su uso rozó la extinción hasta que algunos jóvenes entusiastas de nuestra cultura decidieron convertirse en herederos de la tradición aprendiendo junto a los últimos pastores que la mantenían. En el caso de Gran Canaria destaca la labor de los hermanos García (Ramón y Miguel García Artiles) que aprendieron, sobre todo, con Don Vicente Rivero Quintana.